Comienza tu viaje con una visita al emblemático Árbol del Tule, un majestuoso ahuehuete de más de 2.000 años de antigüedad, con uno de los troncos más grandes del mundo y un peso aproximado de 630 toneladas. Deja volar tu imaginación mientras descubres formas de animales y figuras místicas formadas naturalmente en sus enormes cortezas y ramas.

A continuación, dirígete a Teotitlán del Valle, el famoso pueblo tejedor zapoteca. Aquí, serás testigo de cómo los artesanos utilizan técnicas ancestrales y tintes naturales, incluido el famoso insecto cochinilla, para crear alfombras vibrantes: algunos diseños originales, otros réplicas asombrosas de obras maestras de grandes pintores.

Tu aventura continúa en Mitla, la “Ciudad de los Muertos”, un yacimiento arqueológico zapoteca famoso por sus intrincados mosaicos geométricos y su estilo arquitectónico único. Explora los talleres artesanos que bordean la plaza principal, y no te pierdas la oportunidad de probar los helados tradicionales de Oaxaca antes de seguir tu camino.

La última parada es en una destilería tradicional de mezcal, donde conocerás el proceso artesanal que se esconde tras el licor característico de Oaxaca. Prueba una variedad de mezcales, desde reservas añejos a cremosas infusiones, y haz tuyo el dicho local: “Para todo mal, mezcal; y para todo bien, también mezcal”.